Recuerdo cuando mis amigos y yo (de igual nivel de frikismo por aquellos tiempos) nos peleabamos por quien era mejor, mario o sonic, que si el puto gordo del fontanero, que si el cerdo de mierda…, todo con absoluta pureza y sin la malicia presente en los jóvenes de hoy. En mi caso defendía a Sonic, no tenía ninguna razón lógica, símplemente tenía la master system y debía que defender a toda costa mi compra, que por otro lado, mis meses de ahorro me costo (por aquel entonces me costó 13 mil pesetas).
Recientemente he estado jugando a algunos juegos de nintendo64 en un emulador (aunque tengo la N64 real me resulta más cómodo arrancar el emulador) con el objetivo de sacar algunas ideas para un pequeño proyecto que tengo en mente. A nivel gráfico se puede decir que, comparado con los gráficos de aquella época, eran bastante simplones y poco realistas si los comparamos con, sin ir más lejos, el gran turismo de playstation. Las texturas son simples, los mallas son tochas, los escenarios repetitivos… sin embargo hay algo que es diferente al resto de juegos para distintas plataformas, es la jugabilidad, los detalles insignificantes para el jugador pero que hacen que ese juego sea realmente atractivo, que sea un juego.
Es por esto que ahora recuerdo aquellas peleas y me doy cuenta de que nintendo ha seguido una linea que espero que sigan muchos años, que es la de hacer videojuegos para jugar y no simuladores para ver. Esto demuestra que aunque alguien no siga las directrices marcadas por quién sabe quien, aunque vaya contracorriente, si el producto es de calidad, se puede mantener y seguir adelante.
saludos
PD: Hoy no me apetece mucho hablar de programación aunque me quedo las ganas reservadas para hablar otro día de algunos detalles técnicos de los juegos de N64.