Cuando vamos a comprar algo que no conocemos, sobretodo cuando hay tecnología de por medio, te tienes que fiar del vendedor y un poco de las opiniones en internet (suelen estar bastante sesgadas).
Creo que para que un negocio vaya bien, perdón, para ganar dinero con él, tienes que tener pocos escrúpulos, esto es, lo que la gente denomina saber vender. Es muy común que si comentas los defectos de un producto y si encima te lo dice el propio vendedor termines por no venderlo (a veces esto también interesa). En mi opinión es porque la mayoría de la gente no sabe de la producción: todo tiene fallos, más jodidos o menos, más visibles, etc, pero es algo inherente a todo.. por mucho dinero que gastes, mucho tiempo que consumas, va a haber errores que te van a llegar.
Pongo el caso de la compra de un coche. Cuando vas a comprar un coche buscas un modelo que te guste, que se adecue a tu presupuesto, que se adapte a tus necesidades… entonces vas a internet y haces un recuento de errores frecuentes. Ya los conoces y sabes a lo que te enfrentas cuando lo compras, pero qué pasaría si en el concesionario te dijeran: “oye, a veces en primera da tirones, pero solo a revoluciones muy bajas”. Seguro que ya dudas.
A mi me gustaría, así como te cuentan todo lo bueno también te podrían comentar lo malo… pero eso nunca se hace. No soy ningún especialista, pero es muy fácil convencer a una persona para que compre algo, solo hay que saber un poco de su vida/negocio y ponerselo a huevo. En nuestro caso es muy fácil mirar rápidamente a la nave donde guarda todo el señor y ver qué máquinas tiene, si las ha comprado hace poco, donde las ha comprado, qué tipo de siembra hace (parece difícil, pero al final terminas haciendolo sin querer) y decirte todo lo buenísimo que es el producto para todo lo que tiene (ver anecdota abajo *). Sin embargo no tengo suficientes pocos escrúpulos y casi siempre termino contándoles donde falla, por qué, como está resuleto, etc. En mi opinión es bueno decir en qué falla algo, qué problemas tiene, pero la gente prefiere ver que lo que compra es perfecto. No soy nada partidario de vender las cosas, soy partidario de que te las compren convencidos de lo que compran, sabiendo los posibles fallos y las ventajas. Se reconoce rápidamente a una persona que sabe lo que quiere, incluso por teléfono.
(*) anécdota al respecto de lo anterior: un día estabamos enseñándole a un agricultor el sistema, no lo tenía nada claro, entonces me fijé en que las ruedas de su laguna eran de 225 mm de ancho (las de ese modelo vienen de fabrica con 205mm), lo que me hizo pensar que al tío le gustaba correr. Entonces le dije que en la PDA podría instalar un navegador con detector de radares. Al cabo de unas horas nos llamó para comprar uno :).