El otro día estaba leyendo la realmente buena entrevista al creador de C++, Bjarne Stroustrup. No es el tema de este post, pero me ha parecido una entrevista de las que merece la pena repasar de vez en cuando, igual que el famoso discurso de Steve Jobs.
Creo que no podría estar más de acuerdo con lo que dice este hombre y suscribiría cada una de las frases, pero hay una que últimamente me da que pensar. En el último párrafo de la entrevista:
Know some non-computer field of study well — math, biology, history, optics, whatever. Learn to communicate effectively in speech and in writing. Spend an unreasonable amount of time on some difficult topic to really master it. Try to do something that might make a difference in the world.
Y es que en mi últimamente-más-activa faceta de comercial me he dado cuenta como hablando con gente de otros ámbitos, en concreto del agrícola, tienen una serie de problemas que como programador de corazón que soy pienso: “Si este señor supiese programar un mínimo haría maravillas”.
Me considero un privilegiado por tener conocimientos de un área muy diferente al de la programación y creo que es fundamental que el desarrollador tenga esos conocimientos. No pasa un día sin que vea a un desarrollador trabajando en cosas que no van a resolver ningún problema y casi siempre es porque no tienen la visión de la persona que tiene ese problema (o directamente porque no hay problema :). Además NO creo demasiado en el consultor que va al cliente, éste le explica su problema y le surge la solución mágica para su problema, siempre he creído que la solución correcta surge del verdadero entendimiento de la materia y eso solo pasa cuando estás a pie del cañón.
Además, no creo que haya cosa más reconfortante para un desarrollador es ver como algo que ha creado él se use para solucionar un problema.