O dicho de otra forma, más de 3000 millones de pesetas (he tenido que revisar dos veces la cifra) es la gallina que unos inversores están arriesgando por un producto “casi español”. Para algo más de información sobre todo este chiringuito leete el post de Miguel Arias que lo explica bastante bien..
La cifra acojona, igual que hacían los 8 millones de la ronda A del año pasado. La mayoría de la gente te felicita, creo que creen que esos millones significan que eres rico de un día para otro y ese dinero sirve parau subirte el sueldo y comprar gilipolleces para la oficina. Nada más lejos de la realidad, esos millones significan libertad, sí, pero muchísima presión, mucho trabajo para gastarlos como se debe. De hecho la celebración cuando nos enteramos fueron unos aquarius que nos tomamos Miguel Arias y yo en el bar de la lado de la oficina, seguramente no nos hubiese entrado nada más, teníamos algún tipo de obstrucción en la garganta. El resto de gente del exec de CartoDB estaba en en diferentes partes del mundo dando el callo…
Más o menos puedes hacerte una idea de lo que significa ese dinero para una empresa como CartoDB, no entraré en detalles, pero a grandes rasgos permite pasar a primera división (puestos de descenso eso sí), puedes pensar a lo grande, cambiar tecnologías que todo el mundo piensa que no puedes cambiar o que son inaccesibles, acceder a personas que de otra forma no podrías. Hace 1 año se acabó el ir en coche por un camino, ahora toca crear la vía para la locomotora.
Pero he venido aquí a hablar de mi libro, qué significa esta historia a nivel personal. El año pasado pasé de ser un desarrollador a ser el CTO. Pasas de preocuparte por tu código a gestionar gente, organizar el trabajo, hacer gestiones que no tienen mucho sentido en ese momento, resolver problemas que no deberían tocarte y en los ratos libres hacer las cosas que realmente tienes que hacer (porque quien sabe qué es lo que tiene que hacer un CTO?) . Ha sido un año realmente difícil, no ha pasado un solo día sin pensar “pero qué cojones estás haciendo y por qué no estás programando?”, siempre tienes la sensación de que no llegas, de que siempre hay un problema más urgente que resolver. Creo que esa sensación de no llegar es algo que pasa cuando trabajas con gente del nivel que tenemos en el equipo.
A medida que pasan los meses te das cuenta que todas esas ideas que tienes de a donde llevar la tecnología no puedes hacerlas solo, necesitas un equipo que sepa lo que se hace en cada área, necesitas tiempo para validar las ideas felices y sobretodo, necesitas creerte y hacer creer que puedes hacerlo. Hace un año pensar que podríamos mandar un parche (y que te lo acepten) a Postgres, que podríamos poner en producción una versión propia de Varnish, aguantar 100k QPS parecía una utopía, ahora son reales. Ahora sabemos como montar un equipo, como diseñar unos procesos de trabajo para escalar, como hacer que la gente se interese por el mundo de los mapas, como tienes que negociar para poder hacer lo que realmente quieres. Ha costado y sigue costando, nadie dijo que fuese fácil.
Así que ahora sigo sin saber qué hace un CTO, y la verdad me da igual, pero tengo claro lo que quiero hacer y me gusta mucho.
Esto es un poco como conducir, al principio te preocupa como usas cada una de los componentes del coche pero luego te das cuenta que lo que realmente hace que lo hagas bien es mirar lejos, lo más lejos posible. Ahora ya no tenemos carretera donde mirar, así que habrá que construirla (con todos estos putos amos)