El modelo de datos cambia sí o sí, básicamente porque modelan la vida real y la vida real cambia. Mucho.
Todas las bases de datos series tienen mecanismos para cambiar la forma de los datos. Es muy simple añadir una columna, cambiar el tipo o el nombre. Hay algunas incluso que el cambio es la constante como las orientadas a documento.
Dado que van a cambiar queremos:
Esto es más o menos trivial a nivel de gestión, lo complicado es saber cuando los datos han cambiado. Parece fácil, pero no lo es, a menudo los desarrolladores cambiamos el modelo de datos, el interfaz del API sin tener en cuenta todos los sistemas afectados.
Hay dos cambios fundamentales (bueno, seguramente más, pero estos son los peores) que se pueden producir en los datos:
En ambos casos debe haber una diferencia clara.
La clave del asunto es no afectar a los sistemas que dependen de estos datos (si es posible). Si por ejemplo, se añade una nueva columna o atributo, es fácil hacer que los sistemas que beben información sean compatibles.
Si pasamos de millas a kilómetros es fácil que la mayoría de sistemas se vuelan locos. Tenemos dos opciones, o cambiar todos los sistemas que dependen de mis datos o expongo mis datos a través de un API en el que pueda multiplicar por 0.62 los datos en millas y por 1.0 los de kilómetros.